Fuente: DGAC Chile
- Hace un año, la DGAC chilena instaló una estación radar a más de 3.500 metros de altitud en pleno desierto de Atacama: se trató de la primera dedicada al control de tráfico aéreo alimentada 100% por energía solar del mundo.
El año 1945, se construyeron en Chile, las primeras torres de control en los aeródromos de los Cerrillos y Cerro Moreno, en Antofagasta. Entre los años 1965 y 1967, se adquirieron, 18 estaciones VOR y 30 radiofaros que sirvieron de apoyo a la aviación. El 9 de febrero de 1967 se instaló el primer sistema de aterrizaje instrumental ILS en Chile, en el Aeropuerto Pudahuel, hoy Arturo Merino Benítez. A principio de la década del ´70 se instaló el primer radar, fortaleciendo con él la seguridad aérea en el territorio nacional.
Estos avances en infraestructura y tecnología desde el año 1945, fueron sólo el comienzo de una modernización que la DGAC ha llevado adelante con empeño para los sistemas de la red de aeropuertos y aeródromos a nivel nacional. Su objetivo: velar por la seguridad de la aviación en nuestro país y cuidar el medio ambiente.
En este sentido, el 24 de abril de 2024, marcó un hito en estas materias para la institución. La persistente tarea de modernización de las Unidades Aeroportuarias de la DGAC concretó una innovadora estación radar instalada a más de 3500 metros de altitud en pleno desierto de Atacama: el Primer radar de control de tráfico aéreo alimentado 100% por energía solar del mundo.
Está conformado por un avanzado y eficiente radar de vigilancia primario STAR NG y un radar de vigilancia secundario RSM Modo S, los que, combinados, aseguran la vigilancia operativa para el control del tráfico aéreo civil. Alimentado por energía solar, la estación cuenta con 340 paneles solares para aprovechar al máximo los altos niveles de radiación solar de la región y tiene una capacidad máxima de generación de energía de aproximadamente 960 kWh al día, cubriendo una superficie de 10.000 m2. y permitiendo, además, un impacto ambiental positivo.
El sistema incluye el uso eficiente de la energía y una avanzada tecnología de baterías y generadores de reserva para asegurar el funcionamiento general de la estación y salvaguardarse ante posibles cortes de energía o disponibilidad limitada de las fuentes regulares.
“La implementación del radar del cerro Barros Arana, Provincia de El Loa, es un gran aporte a la seguridad de la navegación aérea, resolviendo la necesidad del Centro de Control de Iquique y del Centro de Control de Aproximación de Antofagasta al contar con visualización, tanto de los tránsitos que operan en el sector de Calama, como los que sobrevuelan el espacio aéreo nacional”, señaló el Director General de la DGAC, General de Aviación Carlos Madina Díaz, durante su inauguración y puesta en marcha hace ya un año.
La instalación y puesta en servicio del Radar Secundario de Vigilancia Monopulso (MSSR, por su acrónimo en inglés), en la Región de Antofagasta, aumenta la cobertura del sistema de sensores radares de la DGAC para la prestación de los Servicios de Tránsito Aéreo, en el espacio aéreo de dicha región, en especial, para las operaciones del aeródromo de Calama y todos los tránsitos internacionales que sobrevuelan nuestro espacio aéreo desde los países limítrofes hacia los países al norte de Chile incluido Centro y Norte América.
Lo beneficios directos son aumento de la capacidad y optimización del uso del espacio aéreo de la Región de Información de Vuelo (FIR) de Antofagasta, elevando los estándares de seguridad, orden y expedición en la entrega de los servicios para la navegación aérea, permitiendo el uso de rutas directas y contribuyendo en la reducción de la huella de carbono de la industria de la aviación.
A un año de su operación, este radar 100% sustentable, es el reflejo del compromiso de la DGAC con la seguridad en los cielos chilenos, así como también responde al cumplimiento de compromisos Internacionales del Estado de Chile en cuanto a la protección y preservación del medio ambiente.