Fuente: Aeropuerto Internacional de São Paulo-Guarulhos

El Aeropuerto Internacional de São Paulo, en Guarulhos, administrado por GRU Airport, es autosuficiente en la reutilización y producción de agua. Las iniciativas de la Concesionaria incluyen el aprovechamiento del 100% del agua lluvia, recolectada en la terminal 3, y el tratamiento de efluentes, reafirmando su compromiso de generar un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad.

Solo en 2024, se dejaron de extraer 78 millones de litros de agua del nivel freático, lo que contribuyó a preservar y reponer el acuífero. Gracias a su autosuficiencia en la producción de agua y el tratamiento de efluentes, el Aeropuerto no depende del suministro de agua ni de plantas externas de tratamiento de efluentes.

De ese total, 46 millones fueron captados por las purgas del sistema de aire acondicionado y sometidos a un proceso de tratamiento de filtración para su reutilización. Otros 26 millones de litros proceden de agua de lluvia recogida en la cubierta de la Terminal 3, que cuenta con sistemas de recogida, conducción y tratamiento para reutilizar el agua de lluvia en sistemas de climatización y sanitarios.

La Planta de Tratamiento de Efluentes (ETE) instalada dentro del recinto aeroportuario es otro frente que trata todas las aguas residuales generadas por las actividades del aeropuerto, recolectadas a través de las estaciones de bombeo. Sólo el año pasado se trataron 78 millones de litros de residuos y, tras esta fase, parte de esta recogida se destinó al lavado y limpieza de patios y pistas, y a la jardinería.

Todos estos programas garantizan al mayor complejo aeroportuario de Sudamérica un ahorro equivalente a más de R$ 25 millones cada año.