Fuente: Iberia

Gema Díaz Prada, trabajadora de la D. Corporativa de Iberia, es una amante confesa de los viajes. Cada vez que surge la posibilidad, se embarca en un viaje. América, Europa, África… El último destino es siempre el que más le enamora. Y esta vez, el último -o penúltimo, ya que seguro que está viajando rumbo a otro- ha sido Oporto. ¿Le acompañas?

“Oporto es una de esas ciudades a las que vuelvo cada cierto tiempo, y siempre descubro algo nuevo, algo que hace que me vuelva a enamorar de esta ciudad”.

Las mejores vistas: desde el Jardim do Morro, uno de los parques con mejores vistas con el Duero a tus pies y encima las fachadas de la Ribeira. Ideal durante la puesta de sol. La mejor panorámica la conseguirás desde el restaurante Fútbol Club Guidalense.

Un paseo: por el barrio de Barredo con sus escalinatas y callejones que terminan en La Ribeira, llena de restaurantes y casas preciosas. Además, puedes admirar el Puente de Don Luis desde abajo y la zona costera de Foz do Ouro.

Un museo: mi preferido es la Estación de Sao Bento, con sus 20.000 azulejos que retratan importantes momentos de la historia de Portugal.

Delicatessen: la Francesinha, un sándwich super calórico, y el archifamoso bacalao. Puedes encontrar los dos en cualquier restaurante.

De compras: La rua de Santa Catarina es la principal arteria comercial de Oporto. Es peatonal y tiene un kilómetro aproximadamente de extensión.

Si vas con familia: tienes que montar en el funicular Dos Guindais, que permite alcanzar la zona alta de Oporto (y acabar en el Jardín del Morro). Otro de los must de Oporto es disfrutar de un crucero por el río Duero.  Y visitar la Livraria Lello, donde Harry Potter compraba sus libros antes de ir a Hogwarts.

No te puedes perder: Miradouro de Vitória y el barrio de Sé, en torno a la catedral de Oporto. Espectacular.