Fuente: KLM
La segunda fase de la prueba de autobuses eléctricos autónomos comenzó en el aeropuerto de Schiphol. Durante esta fase, el aeropuerto, junto con los servicios KLM Cityhopper y KLM Ground, está probando una ruta fija y preprogramada hacia y desde la plataforma. La tripulación del KLM Cityhopper que llegue a Schiphol puede utilizar el servicio de transporte. A principios de este año, Schiphol llevó a cabo con éxito una prueba inicial de estos autobuses autónomos del proveedor Ohmio.
Durante la primera fase de la prueba, la atención se centró en probar las características técnicas y la facilidad de uso. La fase actual se desarrollará en la plataforma, un entorno aún más complejo donde siempre hay mucha actividad simultánea: desde la llegada y salida de aviones hasta las operaciones de manipulación de vuelos y el transporte de tripulaciones aéreas.
Sensores y cámaras
Varias veces al día, hasta finales de julio, el autobús recogerá a la tripulación de KLM Cityhopper en la Plataforma A, donde se estacionan los aviones de KLM Cityhopper antes de la salida y a su llegada a Schiphol. A continuación, el autobús autónomo deja a la tripulación de vuelo en la terminal. El vehículo está equipado con sensores y cámaras especiales y utiliza GPS para maniobrar. El autobús tiene una vista de 360 grados porque está equipado con tecnología LIDAR. Esto permite que el vehículo detecte y mueva objetos ubicados a una distancia de hasta 30 metros.
“Es fantástico que hayamos podido continuar tan pronto con la prueba de los autobuses autónomos. Tenemos curiosidad por saber qué información obtendremos en este lugar, especialmente porque la puntualidad y la seguridad son cruciales en esta ruta. También tenemos curiosidad por saber cómo experimentan los miembros de la tripulación de una aerolínea el transporte autónomo. Esto ayudará a generar confianza en la tecnología y potencialmente facilitará la futura integración de otros vehículos autónomos”, afirmó Jan Zekveld, Director de Innovación de Schiphol.
“Estoy muy entusiasmado con esta prueba y creo que es fantástico que nuestro equipo pueda probar este innovador autobús autónomo. KLC siempre ha marcado la tendencia en la implementación de las últimas tecnologías y esta innovación también encaja perfectamente con el objetivo de KLM de lograr una asistencia en tierra libre de emisiones para 2030”, añadió Maarten Koopmans, Director General de KLM Cityhopper.
Operaciones terrestres libres de emisiones
Para 2050, Royal Schiphol Group aspira a operar los aeropuertos más sostenibles y de mayor calidad del mundo. Parte del plan implica lograr operaciones terrestres más sostenibles y libres de emisiones. Royal Schiphol Group espera que para 2050, todos los vehículos hayan sido reemplazados por una flota de vehículos autónomos de cero emisiones y que todos los procesos asociados estén automatizados. Incluso cuando las operaciones terrestres sean autónomas, el personal seguirá desempeñando un papel importante, asumiendo una función más de supervisión, que implica tareas variadas.